La anemia continúa afectando a dos de cada cinco niños menores de 3 años
En 2021, la prevalencia de anemia en niños fue 38.8%, lo que representa una ligera reducción frente a los niveles alcanzados en 2019 y 2020 (40%)
El Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) publicó los principales resultados de la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar - ENDES 2021. En ella, los resultados apuntan que la desnutrición y anemia infantil aún aquejan al 11.5% y 38.8% de los niños peruanos en su grupo de edad, respectivamente.
La desnutrición crónica infantil (de 6 a 59 meses de edad) y la anemia en menores de 3 años son problemas de salud pública que limitan el desarrollo físico e intelectual de los niños a lo largo de su vida, afectando su productividad y sus posibilidades de mejorar su calidad de vida. La desnutrición crónica infantil se da cuando un niño o niña tiene una talla muy por debajo de lo esperado para su edad (2 desviaciones estándar) de acuerdo con lo establecido por la OMS, mientras que la anemia ocurre cuando una persona tiene un nivel insuficiente de hemoglobina en la sangre (menor a 11 g/dL).
En los últimos quince años, se han logrado avances en la reducción de la anemia y la desnutrición crónica infantil. Sin embargo, la velocidad de descenso de estos indicadores se ha desacelerado marcadamente en los últimos años.
Dos de cada cinco niños
En 2021, la prevalencia de anemia en niños de 6 y 35 meses de edad fue 38.8%, lo que representa una ligera reducción frente a los niveles alcanzados en 2019 y 2020 (40%). A pesar de esta ligera mejora, la anemia continúa afectando a dos de cada cinco niños de dicho grupo de edad. Esta condición afecta especialmente a la población de las zonas rurales (48.7%), donde la tasa de anemia no se redujo en 2021 y superó ampliamente lo registrado en las zonas urbanas (35.3%).
Las deficiencias nutricionales –particularmente de hierro– son una de las principales causas de anemia en los niños y gestantes. Por ello, la disminución de la anemia en 2021 estaría relacionada con el incremento del consumo de suplementos de hierro en niños de entre 6 y 35 meses, luego de que su acceso se viera limitado en 2020 debido a la pandemia. Entre 2020 y 2021, el consumo de suplementos de hierro en niños menores se incrementó en 7.4 puntos porcentuales (de 27.9% a 35.3%) en las zonas urbanas y en 3.5 puntos porcentuales en el área rural (de 35.5% a 39.9%).
Desnutrición y una reducción insuficiente
En tanto, la desnutrición crónica, según el patrón de la OMS, en niños de 6 a 59 meses se redujo ligeramente a 11.5%, luego de mantenerse estancada en alrededor de 12% en el periodo 2018-2020. Al igual que la anemia, esta condición afecta en mayor proporción a los niños de las zonas rurales, donde la tasa de desnutrición (24.4%) es casi cuatro veces que en el área urbana (6.8%).
Asimismo, hay grandes diferencias en la tasa de desnutrición infantil entre las regiones del país. Lima Metropolitana y las regiones de la costa sur –Tacna, Moquegua y Arequipa– presentan los menores niveles de desnutrición crónica infantil. En el otro extremo, Huancavelica, Loreto y Cajamarca presentan los resultados más desfavorables, con la cuarta parte de sus niños de entre 6 y 59 meses con desnutrición crónica.
Mejorar el estado nutricional de los niños del país es fundamental para lograr su desarrollo integral y su adquisición de nuevos conocimientos y habilidades. Para ello, se requieren estrategias diferenciadas según área urbano y rural, de acuerdo con las características específicas de cada ámbito. Cada oportunidad desaprovechada para reducir la anemia y la desnutrición infantil afecta directamente el futuro de los niños del país.