“SÓLO EL 10% DE LAS EMPRESAS APROVECHA AL MÁXIMO EL POTENCIAL DE LA NUBE, CLAVE PARA AUMENTAR LA FLEXIBILIDAD Y AGILIDAD EN UNA ERA DE INCERTIDUMBRE”

  • El Informe Ascendant Madurez Digital 2022 de Minsait, “Modernizar y Crecer en la Nube” revela que, para el 80% de las compañías, la siguiente gran ola de digitalización será más profunda y pasará por el rediseño estructural de sus procesos de negocio, así como por la transición a la nube del mapa completo de sistemas e infraestructuras que le dan apoyo, para ser capaces de exprimir al máximo el potencial de innovación y el valor del dato que ofrece el cloud 

El rediseño estructural de los procesos de negocio, así como la transición a la nube del mapa completo de sistemas e infraestructuras que le dan apoyo, serán los protagonistas absolutos de la próxima ola de transformación digital de empresas y Administraciones públicas, según el Informe Ascendant Madurez Digital 2022 de Minsait, una compañía de Indra, presentado hoy.  

En el mismo, Luis Abril, consejero ejecutivo de Indra y director general de Minsait, explica que “solo el 10% de las compañías cree estar aprovechando al máximo el potencial que ofrece la nube. Capturar ese potencial, con la capacidad de innovación, flexibilidad y adaptación que conlleva, y en un escenario tan incierto como el actual, es un factor estratégico de competitividad. Esa captura pasar por llevar a la nube y modernizar los sistemas tecnológicos que soportan el conjunto de las operaciones en la organización, para poder anticipar diferentes escenarios y facilitar la adaptación del modelo de negocio ante cambios en las fuentes de suministro, los modelos de fabricación, los mercados objetivo y las variaciones de la demanda, ganando en flexibilidad”. 

Otros beneficios son la mejora del time to market, la seguridad, la automatización, la estandarización de procesos y la facilidad en la expansión internacional de los negocios, por citar algunos: “En los próximos años las empresas que lideren el camino experimentarán un período de crecimiento y mejora de los márgenes. Las rezagadas correrán el riesgo de perder su posición”, asegura Luis Abril. 

Del informe se desprende que un 80% de las más de 100 compañías analizadas comparte dicha visión, al afirmar que su principal motivación para embarcarse en un proceso tan complejo es la garantía de ganar en flexibilidad estratégica y operativa, imprescindible para garantizar su permanencia en un escenario de cambio, presente y futuro, marcado por la incertidumbre. De este modo, un 40% de las empresas ya incluye las iniciativas de modernización y crecimiento en la nube como pilares de su actual plan estratégico (porcentaje que llegará al 80% en un par de años).  

La diferencia principal entre la anterior etapa de transformación digital y la que viene es el foco, según ha explicado Silviano Andreu, director de Estrategia e Innovación en Minsait, en la presentación a medios del informe: “Hasta ahora, la digitalización se ha centrado en los procesos de relación con el cliente y la inteligencia de negocio, pero en general no se ha avanzado lo suficiente en las aplicaciones que soportan los sistema críticos de la organización, como puedan ser las cadenas de aprovisionamiento, la fabricación de productos, o el procesamiento de servicios y tecnologías legadas. La digitalización tampoco ha entrado de lleno en los sistemas de recursos humanos ni en los económico financieros. De lo que estamos hablando ahora es de modernizar y migrar todos los sistemas de forma integral a infraestructuras de nube con garantías de seguridad y soberanía del dato. Se trata de dar un paso imprescindible para cerrar el gap entre nativos digitales y jugadores tradicionales”.  

Madurez de los diferentes sistemas analizados: el puesto de trabajo, el más avanzado a raíz de la pandemia 

Los datos recabados en el informe ponen de manifiesto que, efectivamente, pocas son las compañías que se han lanzado plenamente a modernizar los sistemas que soportan el corazón de sus operaciones, debido, entre otros factores, al riesgo percibido por el cambio tan drástico que supone en la operativa y en el núcleo de sus sistemas: la mayoría se ha adaptado a los nuevos escenarios de forma aislada y coyuntural, no como una estrategia global de negocio.  

Así, se observan avances significativos en la modernización de los puestos de trabajo, acelerada por la pandemia, con un 58%; en los sistemas comerciales, con un 50%; y los económico-financieros, con un 36%. Los ámbitos de información y los relacionados con el dato tienen también un grado de modernización en general más elevado, pues se entiende que la relación riesgo-beneficio es más gestionable: algo más de un 41% de las empresas afirma tener modernizados los ecosistemas de datos, destacando la flexibilidad y capacidad de escalar que les proporciona la nube para la gestión y el tratamiento de la información. Frente a estos avances, el 65% de las organizaciones aún tiene sus sistemas core sobre tecnologías tradicionales no digitales.