5 recomendaciones para prevenir la Influenza

  • Durante el último mes, en Ayacucho, Piura y Lima se han incrementado los casos de Influenza, motivo por el cual se lanzó una alerta a todo el país

Tras la emisión de la alerta epidemiológica por el Ministerio de Salud ante un posible incremento de casos de Influenza, también llamada ‘Influenza de Hong Kong’, y la baja considerable de temperaturas en los últimos días, es muy importante fortalecer las medidas de prevención contra las enfermedades respiratorias.

Al igual que los otros tipos de Influenza, se propaga a través minúsculas gotas, producidas al hablar, estornudar, toser, cantar, entre otros, que caen a la nariz o la boca de quienes se encuentran cerca al contagiado; o al contaminar las manos tras tocar alguna superficie, en donde hayan caído estas gotas, y después tocarse los ojos, nariz o boca.

En ese sentido, con el objetivo de prevenir el contagio de esta enfermedad, Cynthia Salcedo, médico especialista de La Positiva Seguros nos brinda cinco recomendaciones para salvaguardar nuestra salud:                                            

1) Presta atención a los síntomas. Si presentas dolor en el tórax, presencia de sangre en el esputo, vómitos, dificultad para alimentarte o tos persistente por un tiempo mayor de 15 días, lo recomendable es acudir al médico, ya que estas condiciones no forman parte de un resfrío común.

2) Aliméntate de esta manera y eleva tus defensas.

  • Pescados: Contienen Omega-3, el cual es importante en el fortalecimiento de nuestro sistema inmunológico lo que ayuda a protegernos de infecciones respiratorias. 
  • Cítricos: Son ricos en vitamina C y pueden ayudar a frenar el avance de un resfriado. Tenemos la naranja, muy rica en vitamina C; la mandarina, rica en betacarotenos y el limón, que tiene gran valor antiséptico y eso lo convierte en un remedio natural contra el dolor de garganta y la tos.
  • Huevos: Tienen proteínas, vitaminas y minerales. Un huevo contiene casi 7 gramos de proteína, pero además aporta vitaminas y minerales, entre los que destacan las vitaminas B6, B12, el selenio y el zinc, fundamentales para mantener fuerte el sistema inmunológico.
  • Yogurt: contiene probióticos, los cuales se encuentran en tu intestino y pueden mejorar la forma en que tu cuerpo absorbe los nutrientes. También estimulan el sistema inmunológico ayudando a tu cuerpo a combatir las enfermedades.
  • Verduras: Pueden reducir el tiempo de la enfermedad. Las espinacas, las coles de bruselas, la lechuga y el brócoli tienen vitamina C.

3) Vacúnate. La mejor forma de prevenir una enfermedad respiratoria como la influenza o neumonía por neumococo es vacunándose. Lo sugerido es que la vacunación se realice de manera anual para reducir el riesgo de tener formas graves de dichas enfermedades, tal como ocurre con la vacuna contra el COVID-19 o de la Influenza, que aunque no evita que podamos infectarnos, pero reduce tanto el riesgo de hacer formas moderadas o graves de la enfermedad como el riesgo de fallecer por el virus.

4) En caso de padecer asma u otra condición respiratoria, refuerza los cuidados sanitarios.

  • Evitar el contacto social con otras personas, sobre todo con aquellos que padezcan infecciones respiratorias agudas, fiebre y/o tos.
  • Cubrirse con el antebrazo o con un pañuelo descartable cuando tose o estornuda.
  • Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón o con gel hidroalcohólico, en especial si ha habido algún contacto con otras personas, o si han tosido o estornudado cubriéndose con la mano.
  • Secarse las manos con un papel de un solo uso.
  • Evitar tocarse la boca, la nariz y los ojos.
  • Limpiar con frecuencia los objetos que se tocan a menudo: pomos, manillas, puertas, mesas, encimeras, ordenadores, teléfonos, etcétera.
  • Evitar compartir platos, cubiertos, vasos, toallas y otros objetos en los que pueda tener contacto con la saliva de una persona.
  • Mantener una distancia con otras personas de, al menos un metro y medio o dos metros.

5) Abrígate de manera razonable. En invierno es común ver a las personas demasiado abrigadas y esto puede ser contraproducente. Asimismo, evitemos en lo posible los cambios bruscos de temperatura, y en caso no podamos, es importante adecuar el abrigo y desabrigo según el cambio climático correspondiente.